Soy fan de ti, de tus vestidos carmesí, de tus excesos de equipaje...
Yo me enamoraba como un fan de tu voz, de tus amigos, de tu ropa y de tu manera de mirar.
No es que yo haya tenido una adolescencia plagada de momentos fan, haya sido excesivamente mitómana o haya acampado a las puertas de los conciertos durante días. Pero, a la vejez, viruelas. (Hiperbólica vejez, que tengo un pelín de trauma con mi inminente entrada en la veintena).
En los últimos tres meses he tenido más momentos fan que en toda mi vida: Quique González (qué majo que fue y qué dos besos nos plantó <3), Iván Ferreiro (20 minutos de conversación, yo no os quiero dar envidia...) y -este es el mejor de todos- la novia del año: la hermana de mi amiga Silvia (¡felicidades a los novios!). LA BODA nos había acompañado en los últimos meses (casi desde que empezó mi fenómeno fan) y no pude resistirme a asaltarlos cuando me los encontré por la calle -juro que fue un encuentro fortuito-.
**Las pruebas gráficas del fenómeno fan andan por Instagram, porque ponerlas aquí me parecía rozar la psicosis**
Casaos pronto e invitadme, que tengo ganas de boda.
EVA