En Nochebuena me puse esta falda y mi tía me dijo que en Oslo no podré ir tan corta. A poco más de una semana de empezar la aventura Erasmus, sin otra cosa en la cabeza y con el arsenal de jerseys ya metido en la maleta (todo lo que Ryanair me permite, que 20 kg no dan para mucho), aprovecho para ponerme faldas y medias bonitas de la mejor mercería del mundo mundial.
Y estreno gafas y estoy muy pesada con esta chupa y tengo a todo el mundo frito con el tema Oslo... y de verdad que parece que no sé hablar de otra cosa últimamente, pero qué se le va a hacer, una no se va a la otra punta de Europa todos los eneros.
Feliz comienzo de 2014, por cierto.
Zaragoza, diciembre 2013.
EVA